La abundancia
Hoy no estoy haciendo mis móviles. Hoy es un día de calma, de repaso, de tener la mente tan concentrada que parece estar casi, en blanco.
Hago balance de lo que me ha traído hasta aquí y de adónde quiero llegar. Recuerdo a mi abuela que, con su mejor intención, solía recordarme que debía ser una niña humilde. Me parece estar oyéndola…» …nenaaaaaa ¡Esa soberbia!» Y yo, que debía ser una descarada, me lo tomaba muy a pecho, agachaba la cabeza y crecía, tapando deseos, como si la humildad estuviera reñida con las aspiraciones y la ambición.
Hoy, veo las cosas de otro modo, comprendiendo, con la perspectiva de los años, los valores mal entendidos. Hoy, me siento abundante y es que, sin esa sensación, no vamos a ninguna parte. Sin la seguridad ni la confianza en ti mismo, como persona abundante y merecedora de la abundancia, el Universo, que es todo y somos todos, no te escucha. Solo oye la frecuencia en la que sonamos.
Soy abundante, y me merezco la abundancia que el Universo puede ofrecerme.
Bajo esta premisa de excelencia y abundancia, está naciendo todo lo nuevo de Marí Queteví, aún escondido, esperando el momento de ver la luz. Te ofrezco lo que mejor que puedo darte, con amor y gratitud, porque tú también eres abundancia y te mereces todo lo bueno que pueda ofrecerte.
¿Cómo suena tu mundo? ¿Abundante y hermoso?
Marí Queteví, amor en suspensión, amor en movimiento.
El Universo escucha la frecuencia en la que sonamos
Tú también eres abundancia y te mereces todo lo bueno que pueda ofrecerte.
Estos son algunos de nuestros móviles más primaverales:
Copyright © 2015 Marí Queteví — Todos los derechos reservados
Si quieres saber más o tienes dudas, escríbenos a
hola@mariquetevi.com